Los tiempos difíciles representan una oportunidad para la electrónica de consumo de segunda mano
El comercio de productos electrónicos para el hogar se ha visto muy afectado en 2022. Esta industria es una de las que mejor rendimiento tuvo durante la pandemia y, por lo tanto, el desarrollo de este año se compara con cifras elevadas.
Las ventas también se han estancado a medida que los tipos de interés y los precios de la energía han aumentado, y la escasez de semiconductores también ha sido un factor explicativo recurrente para los resultados trimestrales negativos de la industria. También se puede añadir que muchos han regresado a sus lugares de trabajo durante el año, lo que no ha beneficiado a la industria. Además, muchas de las empresas de productos electrónicos para el hogar también han acumulado grandes existencias que han tenido que vender porque la demanda se ha ralentizado. El desarrollo del sector de la electrónica doméstica se sitúa en menos del 10 % durante todo el año 2022.
Algunas industrias son más sensibles a los ciclos económicos que otras, y la industria de la electrónica doméstica es una de ellas. En tiempos difíciles, no hay espacio en las carteras para actualizar los dispositivos tecnológicos a modelos más recientes, por lo que muchos siguen usando teléfonos móviles y ordenadores durante más tiempo. Al igual que en el comercio minorista de la moda, esto ha llevado a las empresas a crear formas alternativas de consumo para los consumidores. Esto incluye, entre otras cosas, la oferta de reparación y la venta de artículos de segunda mano. Un ejemplo es Elgiganten, que vende los productos devueltos a un precio reducido. También hay empresas que han ido un paso más allá y solo venden productos de segunda mano. Un ejemplo de ello es Swappie, que vende teléfonos móviles reparados y ha sido nombrada una de las empresas de más rápido crecimiento de Europa. Ambos ejemplos destacan el interés de los consumidores por la electrónica de consumo de segunda mano.
Fuente: Barómetro electrónico de 2022